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“Vivan unidos a mí que yo los llevaré de la mano a la vida eterna.”


 

“Vivan unidos a mí que yo los llevaré de la mano a la vida eterna.”

Viernes 18 de Noviembre del 2022.                                   12:45 p.m.

 

¡Amados hijos de mi corazón!

Con cuánto dolor vengo a ustedes. Quiero que sepan que en este momento hay muchas almas que se apartaron de la gracia y perdieron la fe,  todo debido a sus prácticas paganas y toda la influencia de todo lo relacionado con la Nueva Era. Si supieran que a través de estas prácticas pierden la vida evitarían hacerlo, solo que debido a toda esta apostasía que estamos viviendo no se dan cuenta y no oyen mi voz que les dice que me amen y que sigan mis pasos.

Yo quiero decirles que mi corazón palpita por cada uno y que todos los que son fieles a mí son guiados de tal manera que no pierden la vida sino más bien la ganan. Yo les pido a cada uno de ustedes que no olviden que Dios ama a sus hijos y los conduce a tener una vida mejor llena de paz y alegría.

Las almas sufren hoy en día porque no me conocen, pero todos aquellos que sí son conducidos por un camino que los lleva a mejorar su vida y a amar mucho.

Ofrezcan su dolor por la salvación de las almas. No olviden que gracias a que di la vida por ustedes ahora no sufren porque son reivindicados por mí. Déjense amar y no olviden que mi corazón palpita por cada uno. Vivan unidos a mí que yo los llevaré de la mano a la vida eterna. Los amo. Amén

Jesús Misericordia Divina

 

 

¡Pequeños míos!

Hoy quiero manifestar mi dolor a todos ustedes. Se necesitan almas guerreras que quieran unirse a mí y rezar conmigo el rosario para rogar por la salvación del mundo. Formen grupos de oración donde haya alabanzas, reparación de los pecados del mundo, así como reparación de las blasfemias que recibimos en nuestros sagrados corazones mi amado Hijo y yo y también se unan a mí como mi ejército que combate las obras de Satanás para que pronto triunfe mi Corazón Inmaculado y Satanás sea encadenado y arrojado a lo más profundo del infierno para siempre con todos los demonios que le siguen y así vuelva la paz al mundo.

Oren, oren y oren y no olviden que el mal se destruye así. Los amo. Amén.

María Santísima del Corazón Inmaculado

 

 

Juan 10

28 Yo les doy vida eterna, y jamás perecerán ni nadie me las quitará.

 

 

 

Dominus es vivus.  

 Gloria in excelsis Deo et in terra pax hominibus bonae voluntatis.