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Mensaje del Domingo 12 de Abril del 2020


“El mal se destruye a través de la oración y la comunión de mis hijos”

Domingo 12 de Abril del 2020……7:30 p.m.

Solemnidad de la Resurrección del Señor
¡Amados hijos de mi corazón!

Hoy quiero que sepan con cuánto dolor las almas ruegan a mí porque esta tribulación termine. Yo comprendo el dolor de mis hijos y deseo que pronto termine esta Pandemia. Los corazones humanos sufren y esto hace que yo también. Son mis hijos por los que he dado la vida y por ellos les pediré que oren mucho. El mal se destruye a través de la oración y la comunión de mis hijos. Ámenme y no olviden que la unión secular produce frutos abundantes. Cuando se unen mi Padre escucha sus plegarias y esto hace que él se conmueva y por tal motivo se apiade de cada uno. Pidan al Padre que se acabe pronto esta Pandemia, que las almas se sanen y que llegue la paz al Mundo.
Hoy te pido a ti que me escuchas que no te olvides de mi Madre porque ella sufre mucho por sus hijos. Es necesario que recurran a ella y rueguen por el Mundo.  Cuando oran con mi Madre ella intercede por ustedes y alcanza de mi Padre la misericordia. Los ruegos de ella pueden ayudar para que se acabe toda enfermedad, dolor y angustia. Oren con ella y no olviden hacerlo con el Rosario en mano. La oración sublime y excelsa es el Santo Rosario porque a través de este rezo se recuerda la vida mía y se enaltece a mi Madre. Hagan un espacio en sus vidas para orarlo con fe y devoción.
No olviden también que es importante unirse a mí en el momento justo que di la vida por cada uno. A las 3 de la tarde mi misericordia es infinita. Oren la Coronilla de la Misericordia y supliquen por el Mundo. Cuando la oración se hace con fe se reciben gracias especiales y además yo he prometido conceder los anhelos de su alma siempre y cuando no se opongan a mí.
Escuchen misa a través de los medios de comunicación. Quien se une a mí en este momento yo lo recibo con gusto y lo alimento de mí como cuando están en misa presentes. El Santísimo está expuesto en vivo también. Únanse a mí y supliquen por el Mundo.
Conmisérense de cada alma y den testimonio de mí con la caridad. Den sustento a los pobres y necesitados. Hay mucha hambre en el Mundo.
Oren, oren y no olviden que este corazón mío los ama. ¡Vengo pronto! Amén.
Jesús Misericordia Divina

¡Mis hijos pequeños!
Con cuánto dolor sufro con ustedes. Ustedes son mis hijos y el dolor de cada uno es mío. Hoy lloro por el Mundo.
Ustedes no saben cuántas almas reconocen a mi Hijo. El dolor los hace susceptibles y se ven abandonados y al padecer recuerdan que mi Hijo es el consuelo de los hombres. Muchas almas se convierten hoy en día, más sin embargo es necesario que comprendan que a Dios se le ama siempre, porque es en la tribulación cuando ellos se acercan a él.
Mi Hijo sufre, por eso quiero que reparen las ofensas que le hacen los que no reconocen a un Dios bueno. Oren y no olviden que si se unen a mí la oración es más fuerte. La calamidad desaparecerá cuando ustedes reconozcan que Dios es Omnipotente y que basta que él determine que se acabe todo el sufrimiento para que esto suceda. Amen a todos y den testimonio de mi Hijo con sus obras. Den caridad. Hoy la gente sufre mucho como aquellas almas que no tienen de comer porque se han quedado sin trabajo. Los amo. Amén
María Santísima del Corazón Inmaculado

Dominus es vivus.

Gloria in excelsis Deo et in terra pax hominibus bonae voluntatis.


Romanos 12
12 Vivan alegres por la esperanza que tienen; soporten con valor los sufrimientos; no dejen nunca de orar.


1 Timoteo 2
1Ante todo recomiendo que se hagan peticiones, oraciones, súplicas y acciones de gracias a Dios por toda la humanidad.


Lucas 1
50 Dios tiene siempre misericordia
de quienes lo reverencian.


Mateo 25
34 Y dirá el Rey a los que estén a su derecha: “Vengan ustedes, los que han sido bendecidos por mi Padre; reciban el reino que está preparado para ustedes desde que Dios hizo el mundo. 35 Pues tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed, y me dieron de beber; anduve como forastero, y me dieron alojamiento. 36 Estuve sin ropa, y ustedes me la dieron; estuve enfermo, y me visitaron; estuve en la cárcel, y vinieron a verme.” 37 Entonces los justos preguntarán: “Señor, ¿cuándo te vimos con hambre, y te dimos de comer? ¿O cuándo te vimos con sed, y te dimos de beber? 38 ¿O cuándo te vimos como forastero, y te dimos alojamiento, o sin ropa, y te la dimos? 39 ¿O cuándo te vimos enfermo o en la cárcel, y fuimos a verte?” 40 El Rey les contestará: “Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de estos hermanos míos más humildes, por mí mismo lo hicieron.”


Apocalipsis 22
12 «Sí, vengo pronto, y traigo el premio que voy a dar a cada uno conforme a lo que haya hecho. 13 Yo soy el alfa y la omega, el primero y el último, el principio y el fin.»



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