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“Hoy han impuesto una herejía que es no compartir el vino consagrado que es mi Sangre en la misa santa.”


 

“Hoy han impuesto una herejía que es no compartir el vino consagrado que es mi Sangre en la misa santa.”

Lunes 29 de Noviembre del 2021.          4:40 p.m.

Hoy espero de cada uno de ustedes fidelidad y compromiso. Un corazón debe siempre estar seguro de que al amor que da recibe respuesta. Cuando un alma sumisa y fiel se apresta a recibir respuesta al amor que da hace que mi corazón se llene de alegría. Hoy el Mundo necesita de almas como la tuya, fieles a mí y obedientes. Yo quiero que comprendan que mi corazón necesita que cada alma de lo mejor de sí.

Hoy comienza un Año Litúrgico. Este año debe ser reconocido con compromiso y entrega. Cuando tu reconoces la importancia de hacer vida mi palabra yo me siento dichoso. Te amo. No olvides que yo te necesito y quiero que tú prosigas el camino que te trazo. Yo he venido a ti muchas veces a implorar que siempre vivas de acuerdo a mi palabra. Ama siempre y no guardes resentimiento con nadie pues quien lo hace sufre y se olvida de mi enseñanza. He venido a ti a darte honor y una vida nueva.

Hoy la enseñanza es acerca de mi Iglesia Santa, la fundé con amor y le di lo mejor de mí. Inspiré a muchas almas y les enseñé a vivir de acuerdo con mis enseñanzas. Les di una entrega muy grande y les pedí no olvidaran reconocer en cada misa mi Cena Pascual. Cuando sucede la misa yo me manifiesto junto con mi Padre amado para darles lo mejor que es alimentarlos de mí. Mi pan es mi Cuerpo y mi vino es mi Sangre. Estas dos especies deben estar presentes en la misa. Hoy han impuesto una herejía que es no compartir el vino consagrado que es mi Sangre en la misa santa. ¿Por qué lo hacen? Que no comprenden que niegan mi palabra y al hacerlo también lo hacen conmigo. ¡Qué dolor tiene mi corazón! Asimismo, han hecho que mi Cuerpo sea manipulado por laicos. Esto no es así ni debe serlo. La Eucaristía solo debe ser dada por sacerdotes o diáconos. Nadie más debe hacerlo. Mi cuerpo se ensucia con las manos pecaminosas de los laicos y al hacerlo el alimento que se da a mis hijos va contaminado. Lamento mucho que esto suceda así. Pidan en sus Iglesias que les compartan mi Sangre preciosa. Yo los amo y quien es fiel a mí debe oponerse a las herejías impuestas en la Iglesia.

Hoy los sacerdotes han olvidado que deben exigir a cada alma que se alimente de mí sin culpas graves. Los pecados graves hacen que la Eucaristía se transforme en vez de alimento en condenación para las almas. Confiésense antes de comulgar si su pecado es grave. Yo los amo a ustedes y les pido fidelidad.

Los dejo diciéndoles que se acerca el tiempo en que vendré de nuevo. Prepárense y no olviden mantener cada uno de ustedes su lámpara encendida. Amén

Jesús Misericordia Divina

 

Lucas 22

17 Entonces tomó en sus manos una copa y, habiendo dado gracias a Dios, dijo:

—Tomen esto y repártanlo entre ustedes; 18 porque les digo que no volveré a beber del producto de la vid, hasta que venga el reino de Dios.

19 Después tomó el pan en sus manos y, habiendo dado gracias a Dios, lo partió y se lo dio a ellos, diciendo:

—Esto es mi cuerpo, entregado a muerte en favor de ustedes. Hagan esto en memoria de mí.

20 Lo mismo hizo con la copa después de la cena, diciendo:

—Esta copa es la nueva alianza confirmada con mi sangre, la cual es derramada en favor de ustedes. 

 

Dominus es vivus.  

 Gloria in excelsis Deo et in terra pax hominibus bonae voluntatis.