“No
olviden que mi Hijo vino a traer vida y que si pecan esa vida se acaba.”
Viernes 11 de Febrero del 2022 1:10 p.m.
Fiesta de nuestras Señora de Lourdes
¡Almitas mías y muy pequeñas!
En este día importante se recuerdan las apariciones que
hice en Lourdes Francia. Cuando decidí aparecerme ahí fue porque quería dar
testimonio de que mi Hijo amado escucha sus plegarias y yo intercedo por ellas.
Cuando la sanación llega a cada alma su corazón se inflama de alegría y agradece
a mi Hijo amado, así como también a mí. Yo quiero que ustedes comprendan que mi
Hijo amado es bueno y a quien pide con fe y compromiso de cambiar le concede su
petición que han dirigido a mí, pues se concede por voluntad de él y la
intercesión mía.
Hoy quiero hablar de algo triste y doloroso que sucede
consecuentemente en el Mundo, la fe se acaba y las almas pierden la gracia. No
olviden que mi Hijo vino a traer vida y que si pecan esa vida se acaba. Quien
cree en él nunca queda defraudado pues su amor es hermoso y la maravilla que
hay en él es esa ternura que da a quienes le son fieles. Si quieres tener una
vida triste entonces no lo ames, pero si quieres vivir en plenitud con alegría,
paz y mucha felicidad entonces acrecienta tu fe. Cuando yo te hablo así es
porque quiero que comprendas que la vida sin él es de mucho dolor y desgracia.
Ama, ama por sobre todo a mi Hijo amado que él es bueno. Mi
corazón se inflama de alegría cuando lo haces. Yo amo a mi Hijo y lo único que
quiero es que piensen que toda alegría viene de él. El amor que da ayuda a que
toda alma olvide los rencores y los odios. La paz llegará al Mundo si ustedes
comprenden que deben vivir unidos a él. Cada corazón que se abre a la gracia
recibe una fe profunda.
Ámalo y no olvides que debes orar e ir a misa. Cuando vayas
a misa recuerda que si has pecado es necesario confesarte primero. No tengas
miedo de hacerlo porque no es al sacerdote a quien le dices cómo has pecado
sino a mi Hijo amado.
Yo te pido que cuando reces lo hagas siempre con amor. Se
agradecido y cuando pidas hazlo con fe. Perdona en todo momento y dile a mi Hijo
amado que olvidas todo rencor y odio. Promete cambiar y lleva una vida mejor y
mi Hijo amado te llevará a un camino seguro. Sana tu vida y recuerda que mi
Hijo amado cura las heridas de tu corazón.
Reza el Rosario siempre. Si no sabes cómo hacerlo compra un
librito donde paso a paso te dirija. Si tú haces el Rosario lograrás que todo
mal se vaya. La respuesta a cada súplica que me dirigen, cuando lo hacen así,
les ayudará a que yo como Madre eleve esas mismas súplicas a mi Hijo amado.
Los amo. No olviden que el amor que les doy es hermoso,
tierno y dulce. Amén
María Santísima del Corazón Inmaculado
Juan 4
14 pero
el que beba del agua que yo le daré, nunca volverá a tener sed. Porque el agua
que yo le daré se convertirá en él en manantial de agua que brotará dándole
vida eterna.
✤ ✤ ✤ Dominus es vivus.
Gloria in excelsis Deo et in terra pax
hominibus bonae voluntatis.