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“Amo a mis hijos y lo digo mil veces, y cuando digo esto es porque los quiero bien, con una vida hermosa, llena de felicidad y mucho amor.”


 

“Amo a mis hijos y lo digo mil veces, y cuando digo esto es porque los quiero bien, con una vida hermosa, llena de felicidad y mucho amor.”

Sábado 25 de Marzo del 2023.             6:15 p.m.

Solemnidad de la Anunciación del Señor.

 

¡Hijos queridos de mi corazón!

Un compromiso es ser fiel y que debes servir con el corazón. Servir a Dios es así, no olvidar que tienes un compromiso con él y buscar siempre honrarlo.

Amo a mis hijos y los quiero fieles a mí. Cuando digo esto es porque solo quiero que busquen la verdad en mí y se conduzcan por el buen camino. Decir esto es que deben amar y reconciliarse con todos, no odiar a nadie y perdonar siempre. Si tú haces esto has comprendido la enseñanza que vine a traer al mundo.

Soy Dios bueno y a mis hijos los recompenso cuando son buenos, sumisos y fieles a mí. Si quieres seguir mis pasos debes conducirte con dignidad, esto quiere decir que debes ser bueno y olvidar el pasado que te hace sufrir.

Yo vengo a sanar tu alma y vengo a darte vida. Sanar al mundo es lo que hago yo siempre. Para que esto suceda deben dejarse guiar por mí porque yo no puedo obligar a nadie. Yo di la libertad al hombre para conducirse en el mundo, así es que debes saber que al no obligar a nadie te permito dirigirte por tu propia cuenta si así lo quieres.

Debes saber que te amo y yo quisiera que siguieras mis pasos. Hoy en día hay muchas almas que se han olvidado de mí después de que se consagraron y eso me duele, esto es a causa de su falta de fe y tibieza. Amo a mis hijos y los quiero bien y por eso te pido que no olvides que mi corazón sufre por mis hijos que me abandonan. Amo a mis hijos y lo digo mil veces, y cuando digo esto es porque los quiero bien, con una vida hermosa, llena de felicidad y mucho amor. El amor es necesario para vivir, sin él el alma muere. Yo he venido a conducirlos a una vida nueva llena de paz y alegría.

Te amo, déjate conducir por mí y no olvides que el amor de Dios es lo más maravilloso que hay. Amén

Jesús Misericordia Divina

 

 

¡Pequeños míos!

Quiero conducirlos hacia mi hijo. Para hacerlo necesito que ustedes comprendan la importancia. Amar a Dios significa una vida llena de plenitud, de paz y armonía. Si tú te dejas amar por él verás que tu vida cambia y el dolor se va. Él sana tus heridas y te da alegría, una alegría nueva que no conoces y que es mejor que nada en el mundo.

Vengo a darte lo mejor de mí como tu Madre que es darte a mi Hijo muy amado para que conozcas la verdadera felicidad. Te amo. Amén

María Santísima del Corazón Inmaculado

 

 

Salmo 36

7 (8) ¡Qué maravilloso es tu amor, oh Dios!
¡Bajo tus alas, los hombres buscan protección!
8 (9) Quedan completamente satisfechos
con la abundante comida de tu casa;
tú les das a beber de un río delicioso,
9 (10) porque en ti está la fuente de la vida
y en tu luz podemos ver la luz.

 

 

Dominus es vivus.  

 Gloria in excelsis Deo et in terra pax hominibus bonae voluntatis.